Era el día 25 de noviembre de 2016 a las 23:30 locales, estaba en la ciudad de Miami, estado de la Florida, Estados Unidos de América, el destino me había colocado en esa ciudad ya que me encontraba en medio de un viaje familiar cuyo destino había sido la ciudad de Orlando, FL y Miami era la escala previa para retornar a la patria El Salvador, en ese día trascendental enciendo el televisor de nuestra habitación del Hotel Intercontinental de Doral, Florida y me encuentro con la noticia y el siguiente titular en la pantalla de la cadena CNN: BREAKING NEWS. FORMER CUBAN LEADER FIDEL CASTRO DIES. ¿Qué, Fidel? Una sensación surrealista invadió mi ser, sinceramente no quería estar en esa ciudad para recibir esa noticia, cuna de la disidencia, de la contrarrevolución y de la Fundación Nacional Cubano Americana, pero ahí estaba y tenía que asumir esa realidad. Fidel sobrevivió 637 atentados contra su vida y desapareció físicamente a los 90 años de edad un 25 de noviembre de 2016 en su Cuba natal, ¿Muerto? Como decían los titulares del Miami Herald al amanecer del 26 de noviembre NO, Fidel no ha muerto, su legado está vivo, su presencia sigue ahí, incólume ante las afrentas y los ataques de su Revolución Socialista que llevó a un verdadero cambio a Cuba, un ejemplo vivo de lucha y dignidad ante las mayores afrentas, ejemplo de resistencia ante un cruel bloqueo financiero, económico y comercial hacia la Mayor de las Antillas por parte de los Estados Unidos de América.
Hoy se cumple un año de su desaparición física, hoy el Movimiento Salvadoreño de Solidaridad con Cuba homenajeará a ese gigante llamado Fidel a partir de las 4:00 p.m. en el Redondel Schafik Handal de la ciudad de Mejicanos, San Salvador. Porque su legado sigue vivo y la historia ya lo absolvió. ¡HASTA LA VICTORIA SIEMPRE!